Ables (Llanera, Asturias)

31 diciembre 2004

 

Cuno Corquera (1918/2002), escritor de Ables

Seudónimo de D. Secundino Hevia Rodríguez. Nació el 3 de marzo de 1918 en Ables (Llanera, Asturias). Fundó y animó grupos de teatro costumbrista durante los años 40 y 50. En aquel tiempo empieza a escribir en asturiano siguiendo modelos de autores como Teodoro Cuesta o el su contemporáneo Antonio García Oliveros. Desde entonces participaría en numerosas actividades públicas: recitales, pregones, tertulias y fiestas privadas.

En 1993 el Concejo de Llanera y la Consejería de Cultura publican "Cuentos,cuentiquinos y poemes", con la poeta Esther Prieto a cargo del prólogo y la edición. Se trata de una recopilación de poemas y monólogos de carácter humorístico e ingenioso, al estilo de la poesía en asturiano más popular antes del resurgimiento.

BIBLIOGRAFÍA

Creación

Corquera, Cuno
CUENTOS, CUENTIQUINOS y POEMES
Edición e introducción d’Esther Prieto. Llanera
Ayuntamiento de Llanera, 1993. — 176 p. ; 24 cm.
ISBN 84-88034-21-0

Bibliografía

Prieto, Esther
Introducción a: "Cuentos, Cuentiquinos y Poemes".
Ayuntamiento de Llanera, 1993, pp. 7–11.
ISBN 84-88034-21-0

González Rodríguez, Abel / García Ordoñez, Nieves
Artículo “Cuno Corquera, asturianista”, pp.46-50.
Libro “HISTORIAS VIVIDAS, HISTORIAS CONTADAS”.
Llanera Ediciones
ISBN 84-609-3527-2

------------------------------------------------------------------
ANTOLOGIA
SUFRIMIENTOS DE MANOLÍN

Soi Manolin el pequeñu,
trabayo nes carreteres,
gústame muncho’l vinín
y muncho más les muyeres.

Pero por desgracia mía
o por mor de la estatura,
empiezo mui bien con toes
y nun fino con denguna.

Tuvi una na Cuesta d’Hevia,
bona moza y bona raza
y rechazóme enseguida
porque ella yera más alta.

De clase nun yera mala,
nun debe tar mui represa
pos según los que lo entienden,
yera de raza holandesa.

Y puede que sea verdá,
pos al baillar l’agarráu,
yo ¡mianiques! —y paecía
que taba baxo un teyáu.

Yo nun tuvi más remediu
qu’acepta–y la negación
y mirar si n’otru sitiu
atopaba otra ocasión.

Y atopela de verdá
y cuandu escomencipiaba
mandánonme un día axudar
meter yerba na tenada.

Acepte mui contentín
pensando n’entrar con ella,
pero ella quedóse en carru
y pa dientru foi la vieya.

Baxé del payar sudando
y dempués de convidame,
nun tayuelu al llau de casa
invitánonme a sentame.

Ella sentóse tamién,
pero algo lloñe de min
y dempués de la sudada,
mui claro yá nun lo vi.

Falamos de munches coses,
les más yeren boberíes,
pero na conversación
salienon les romeries.

Igual que soi Manolín,
con un poco cobardía,
invitéla dir conmigo
a un fiestín de romería.

Dixome que sí, que diba,
que la esperara en prau
y allá foi’l probe Lolín
col meyor traxe mangáu.

Dempués de tomar un vasu
y comprar un puru habanu
cansé dar vueltes pel prau
y el resultáu foi vanu.

Ente toles qu’ellí taben
la mio moza nun apaecía
y diome por pensar mal,
que daqué-y pasaría.

Sigui pensando con pena
¡tará mala, la probina!
¿o pasaría dalgo en casa?,
igual morrió la pollina.

Cansé de tener idees
y atopé al mio amigu Tino
y fuimos pa la Barraca
a tomar vasos de vino.

Yá tábemos los dos bien
que falta facía una foto
y cuandu me fui dar cuenta,
robárenme la moto.

¡Ai, Manolin!, probetayu,
dixi al veme comu taba,
nin de raza holandesa
nin sudando na tenada.

Al día siguiente llegué
al sitiu de trabayar,
tuvi la media xornada
debaxu d’una figal.

Durmiendo la filoxera,
suañando cola tenada,
cola de raza holandesa
y cola moto robada.

Cuandu l’encargáu me dixo
que yera hora comer,
esperté desmemoriáu
pensando que yera ayer.

Si sigo ansí fracasando,
dígovoslo, y soi sinceru,
antes de mui pocu tiempu
tomo rumbu al estranxeru.

Pos ellí nun me conocen
y anque tea contratiempos
naide sabe más que yo
cuandu tea sufrimientos.

(De Cuentos, cuentiquinos y poemes)


 

Aguas de Ables

Nota previa: Lo que a continuación se expone es la reproducción casi íntegra (no se incluye el plano de situación que se menciona en el primer párrafo) del documento elaborado por la Asociación de Vecinos de San Juan relativo a las fuentes y demas surtidores naturales enclavados en Ables. Este informe data de 2003 y es posible que ciertas apreciaciones no sean correctas en la actualidad. En tal caso agradecemos nos indiquen aquellas informaciones que resulten imprecisas.


RELACION DE FUENTES, LAVADEROS Y BEBEDEROS DE LA PARROQUIA DE ABLES (LLANERA)


Aquí se adjunta una relacion de las fuentes, los lavaderos y los bebederos que se encuentran en la parroquia de Ables. Tambien se adjuntan fotos del estado actual de los mismos, que en algunos casos dejan mucho que desear, y al final un plano de situación.

1) FUENTE DE MAYADUN:

Sita en el barrio de Lineres, a la altura del nº 24, en la carretera San Cucao – Campiello. Recientemente se talaron los árboles que había alrededor y se rellenó en sus alrededores. No echa agua por el caño y está cubierta de maleza.



2) FUENTE DE PERUYERES:

Sita en el barrio de Peruyeres, a la altura del nº 1. Su estado es de completo abandono. Está cubierta de maleza.





3) FUENTE DEL BARRERO:

Sita en el barrio de Portiella en la finca del mismo nombre. Su estado de conservación es bastante bueno, además, recientemente, se realizaron mejoras en el acceso.






4) FUENTE LOS TEYEROS:

Sita entre los barrios de Andorcio y Portiella, cerca de la charca “La Barrera”. Su estado es de total abandono. Esta fuente, que años atrás se consideraba una de las mejores del pueblo, hoy está cubierta de maleza. Además la finca en la que se encuentra se utiliza como vertedero de purines.





5) FUENTE DE PORTIELLA:

Sita en el barrio de Portiella, a la altura del nº 15. A simple vista su estado es bueno, pero la calidad del agua se ha deteriorado tanto en los últimos años que ya no es muy saludable.





6) FUENTINA:

Sita entre los barrios de Lineres, de Ables, y Guyame, de San Cucao. Su estado es aceptable. Últimamente su caudal de agua es menor.





7) FUENTONA:

Sita entre los barrios de Lineres, de Ables, y Guyame, de San Cucao. Su estado es aceptable, aunque le vendría bien desbrozar sus alrededores y adecuar su acceso.





8) FUENTE DE SANTANA:

Sita en el barrio de Ables, un poquito más abajo de la antigua escuela. La fuente y el abrevadero están en bastante buen estado, pero el lavadero necesitaría unos arreglos.







9) BEBEDERO DE ZALANDRÓN:

Situado en el barrio de Andorcio, a la altura del nº 1. Su estado es aceptable pero sería razonable cuidar su entorno.





10) LAVADERO DEL CARBAYU:

Situado en el barrio de Andorcio, a la altura del nº 17. Su estado actual es de total deterioro por la falta de uso, aunque sigue manado el agua.





11) BEBEDERO DE FORNAMORÁN:

Situado entre los barrios de Lineres, de Ables, y Guyame, de San Cucao. Se conserva en buen estado.



12) CHARCA DE LA BARRERA:

Situada en el barrio de Portiella. Requeriría una actuación más importante, tanto de saneamiento de las aguas como de acondicionamiento de los alrededores. También sería importante el control sobre los vertidos de basuras que se realizan en sus alrededores.



Cómo conclusión podemos afirmar que en general el estado de las fuentes es bastante malo, lo cual es bastante lamentable, ya que de estas fuentes bebieron nuestros antepasados y jugaron un papel fundamental en la sustentación de las actividades agrícola-ganaderas tan importantes en el concejo.

Por todo esto y por el deseo de que las próximas generaciones puedan disfrutar de este gran legado proponemos que un Representante de la Corporación Municipal las visitara y se realizaran las actuaciones oportunas para la recuperación de las que están en mal estado, el mantenimiento de las demás, así como análisis periódicos de su potabilidad.

La Comisión de Servicios de la AA.VV. se ofrece a guiar la visita, así como a solucionar todas las posibles dudas que pueden surgir.


 

La carretera de Ables (Ll-1)

Lo que a continuación se expone es la transcripción literal del artículo arriba reproducido que se publicó en el diario PUEBLO (editado en Madrid y actualmente desaparecido) con fecha 20.12.1968, y referido a Ables, a la construcción de la carretera que va de El Cruce a Portiella, atravesando la parroquia. Con independencia del estilo, propio de aquella época, lo que se destacaba y ponía de manifiesto era la actitud de convivencia y colaboración de un grupo de vecinos voluntarios, actitud que servía de base y ejemplo a este artículo cargado de elogios. Disfrutadlo, y los que guardéis memoria de esos días lucid orgullo y haced apología de las ventajas de la unión.
-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-

ABLES DE LLANERA (ASTURIAS)
UN PUEBLO QUE CONSTRUYE SU PROPIA CARRETERA

Tierras que huelen a carbón y a ganado, a industria y a manzanas, a mineros y a labradores, a alfalfa y a maíz. Sus gentes, esas gentes que le roban a la tierra de sus entrañas el mineral o la cultivan, son hospitalarios y amables. Te presentas en su casa y antes de saber quien eres te preguntan si has comido. Se sienten decepcionados si no tienes hambre; entonces sale a relucir la botella de vino con su caña, un vino entre áspero y agrio que sienta a las mil maravillas.

El comedor es la cocina. Me imagino que en esos asientos corridos, que a la vez sirven para guardar en su interior viandas y provisiones, se han tomado muchas de las decisiones importantes de los pueblos y las familias de Asturias. Sus hombres y sus mujeres son honrados a carta cabal, lo suyo es de ellos y lo de los demás tiene su dueño. A la puerta de una casa, de esas que tienen su hórreo y sus panojas colgadas de la barandilla, puede usted dejar tranquilamente las almadreñas o un paquete con cuarenta mil duros, si alguien lo toca es para ponerlo al resguardo de la lluvia.

Tienen sus autoridades municipales, a las que saben darle el lugar debido, pero tienen sus jefes naturales a los que respetan y obedecen si saben ser verdaderos jefes.

Ables de Llanera es un pueblo que vive su existencia entre Oviedo y Avilés. Está esparcido a lo largo y ancho de una campiña de prados verdes y fructíferos; sus hombres alternan el trabajo en fábricas y empresas con el cuidado de sus ganados.

“La carretera la hacemos todos”

Nosotros viajamos hasta este pueblo porque sus vecinos, sus hombres, han decidido hacerse una carretera nueva. La que tenían hasta ahora es un camino intransitable, los baches son zanjas y el barro llega hasta los ejes del coche. Es un camino ideal para probar la resistencia del mejor “todo terreno”. Un día, los vecinos de Ables se reunieron en una de sus cocinas, se sentaron en sus bancos largos, sacaron la botella de vino y el tabaco negro, atizaron el fuego y discutieron su problema. NECESITAMOS UNA CARRETERA NUEVA. Pues si se necesita se construye. Y comenzaron las gestiones para sacar dinero de donde fuera. Ayuntamiento, Diputación, aportaciones de los vecinos…

- ¿Su nombre?
- Aquí no hay nombres, somos todos. Diga usted que habló con la Junta de Vecinos de la Parroquia de Ables. Bueno, un nombre sí le voy a dar, es el personaje más importante y el que con más calor se ha tomado la obra de la carretera. Es el guaje Valentín.

Después les hablaré de este chaval de cuatro años.

- Cuénteme la historia de su carretera.
- Mire usted, día a día se ponía el camino intransitable, no había forma, y una tarde pensamos que deberíamos arreglarla. Comenzamos a hacer gestiones, porque ya se sabe que sin dinero no se puede hacer nada. Y después de muchas idas y venidas conseguimos que la Diputación nos concediera cincuenta mil pesetas.

Y con las cincuenta mil pesetas que tenían los veintiocho hombres del pueblo comenzaron los trabajos para hacer transitables los tres kilómetros de baches y zanjas que los comunican con la carretera general de Avilés a Oviedo. Para realizar sus trabajos los vecinos de Ables de Llanera emplean los domingos, día que, lógicamente deberían usar en su descanso y esparcimiento y que, sin embargo, alegremente y con tanto ahínco como si les pagaran a destajo se afanan desde las ocho de la mañana hasta que las primeras sombras de la noche caen sobre los manzanos del pueblo.


Organización perfecta

Sí, señores; la organización del trabajo es perfecta y no deja el menor resquicio a no arrimar el hombro. Cada uno tiene su cometido perfectamente definido y las horas de trabajo son contabilizadas en un “planning” general, en el que figuran los voluntarios trabajadores y que servirá en su día para saber cuánto ha costado la construcción total de la carretera.

- Aquí se contabiliza todo. Nada se deja sin registrar y anotar en el libro que abrimos el día que decidimos hacer nuestra carretera y que se cerrará con la firma de la autoridad que venga a inaugurarla.
- ¿Cuánto les costará la carretera?.
- Alrededor de trescientas mi pesetas.
- El trabajo que ustedes realizan ¿en cuánto podríamos valorarlo?
- Pagándonos poco –y sonríe al decirlo- en más de ciento cincuenta mil pesetas. Y eso que nuestra hora de trabajo la valoramos en veinticinco pesetas. Un precio baratito.

Cuando mi compañero Leo y yo llegamos al pueblo –era la hora de comer- solamente esparcían piedras el trabajador más viejo –Francisco, de ochenta años- y su yerno. Ellos ya habían terminado de comer y aprovechaban que la lluvia no era muy fuerte para terminar un pedacito que los compañeros habían dejado sin terminar.

- Esta tarde queremos pasar el rodillo hasta la curva y conviene que toda la piedra esté extendida. Así, a ratos perdidos, vamos haciendo metros.

Llevan siete domingos de trabajo y ya han cubierto la tercera parte de la obra; casi lo que tenían previsto el día que comenzaron.

- Vamos un poco retrasados por las últimas lluvias, pero aprovechando los días de Navidad, que algunos tendremos vacaciones en nuestros empleos, le daremos un pequeño empujón.

El guaje Valentín

Este es el personaje más importante de todo Ables de Llanera. Es un chavalín de cuatro años que se ha tomado la carretera como un asunto personal. Los domingos, a las ocho de la mañana, ya está, rastrillo al hombro, buscando a los mayores para acompañarlos durante toda la jornada. Le gusta esto y se lo ha tomado como el juego más importante de sus pocos años. Pero un juego muy en serio porque no pierde ni un momento. Su rastrillo pasa una y otra vez sobre las piedras y lo hace bastante bien. Es el que con más entusiasmo se lo ha tomado. Y le dejan porque el pequeño disfruta.

- Vamos, que son las ocho menos cuarto y hay que ir al tajo –va avisando Valentín, puerta por puerta, a todos los hombres que trabajan los domingos en la carretera.

Valentín no pierde el tiempo, es el primero que se levanta y el que come antes para estar lo más pronto posible en el tajo.

- Valentín, ¿por qué trabajas?
- Me gusta.
- ¿De quién es esta carretera?
- Mía. Y tú, ¿por qué no me ayudas?
- No sabría… Esto es difícil.
- Yo puedo enseñarte, mira como lo hago… ¿Ves…?

Y, efectivamente, no me quedó más remedio que hacer que trabajaba un rato para no decepcionar al personaje más famoso de esta carretera, que un grupo de vecinos de estas tierras asturianas se han propuesto dejar en inmejorables condiciones. Tanto que, si les llega la ayuda que les ha prometido el Ayuntamiento de Llanera y algún organismo provincial da un paso adelante y les concede unas pesetas, están dispuestos a asfaltarla incluso. Si bien ellos mismos me confirman que con el drenaje que han hecho y con la piedra molida asentada no habrá barro ni el menor charco en su nueva carretera.

Es un bonito ejemplo de convivencia humana. Es de esas pocas veces que todos los hombres de un pueblo piensan igual y trabajan guiados por los mismos fines. Sin envidias ni rencillas, con una camaradería que es ejemplo para
el más exigente observador.

XAVIER RODRIGO Y LEO, ENVIADOS ESPECIALES



-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-


Archives

27/04/2003   28/04/2003   30/04/2003   01/05/2003   02/05/2003   28/12/2004   29/12/2004   31/12/2004   01/01/2005   20/10/2005  

This page is powered by Blogger. Isn't yours?